Semana 15
En el deshuesadero, León y "La Iguana" se aterrorizan al descubrir los cuerpos de Conrado y Milagros. El padre de León finalmente reacciona, pero no así la mamá de "La Iguana". Conrado alcanza a decir que unos "pachucos" fueron quienes los atacaron. En eso llega el teniente Merino y descubre que Milagros está viva, por lo que rápidamente piden una ambulancia. Mientras esperan, "La Iguana" pregunta a León por la pistola que arrebataran a los Montijo. "La Iguana" se ve decidido a tomar venganza.
Mientras tanto, en casa de los Luna, Jovana corre a Marina (ante la disimulada satisfacción de Priscila), pues ya no la considera su amiga. Arriba, en el cuarto de servicio, Inés pregunta a Catalina por las cartas que durante años envió a Priscila; Catalina responde que las rompió, pues de ninguna manera iba a mostrarlas a la joven.
Los Montijo llegan a casa de León con la intención de matar a "La Iguana" (quien ya se encuentra ahí, oculto y esperándolos con la pistola). En eso, Bruno aparece y los dos hampones lo amenazan. Bruno inventa que "La Iguana" salió de la ciudad. Valente lo amenaza con que si no contacta a "La Iguana", Emilia será la que lleve las de perder. "La Iguana" no puede disparar el arma, pues teme herir a Bruno. Al final, los Montijo se van.
Milagros se encuentra muy mal. El doctor avisa a León que quizá la señora no pase de esa noche. Sin embargo, Milagros sobrevive al pronóstico. Al día siguiente, "La Iguana" llama por teléfono a Valente (desde un celular prestado) e inventa, para despistarlos, que está en Toluca. Los Montijo caen en la trampa, comienzan a dar por perdido a "La Iguana".
Más tarde, León y Jovana se encuentran casualmente en la misma iglesia (ambos han ido a orar por la solución de sus respectivos problemas). Jovana toma una actitud de lejanía con León, pues está segura de que éste la engañó con Marina.
En casa de Marina, Demián se entera por el periódico que moverán de lugar la tumba en que supuestamente descansa su padre. Se lo comenta a Andrea, quien miente diciendo que "eso ya no importa". Más tarde, Demián acude al panteón y trata de evitar que los trabajadores se lleven el ataúd de Iván. En la riña con ellos, el ataúd se abre y de éste únicamente salen piedras, descubriendo que no había ningún cuerpo en el interior. Demián no entiende qué sucede.
Marina acude al reclusorio para darle a Isaura, la abogada, el dinero que juntó para cubrir los honorarios. Esteban agradece enormemente el gesto a la joven. En eso, Jovana llega y trata con mucha frialdad a Marina, quien entrega a Jovana la invitación a la boda de Imanol y luego se marcha.
Más tarde, en casa de los Luna, León intenta explicar a Jovana que el supuesto beso a Marina fue en realidad "respiración de boca a boca", porque Marina se desmayó. Jovana, incrédula, lo abofetea. León ya no sabe qué más hacer y mejor se retira. Mientras, en el cuarto de servicio, Catalina (agobiada por las preocupaciones y un fuerte dolor de cabeza) está buscando en el cuartito de servicio las cartas que Inés enviara a Priscila; entonces, Catalina descubre el frasco de "éxtasis" que Priscila guardara ahí. La señora cree que las pastillas son aspirinas, por lo que se las toma.
Buscando evadirse de una realidad que no entiende, Demián comienza a tomar de las pastillas de droga que Fher le regaló. Luego, el junior se va, manejando a gran velocidad por las calles de la urbe, recordando todas las mentiras que Andrea y Fernán han dicho respecto a su padre. Más tarde, bajo los efectos de la droga, Demián llega a buscar a Jovana (León acaba de irse, sin haberse podido reconciliar con la muchacha). Demián confiesa a Jovana que la ama, agrega que si se porta mal con ella, es porque no soporta que lo ignore... e intenta besarla a la fuerza.
Jovana suelta un puñetazo a Demián, evitando así que éste la bese. El junior pregunta por qué nunca le dio una oportunidad. Jovana le canta sus verdades y se mete a su casa, dejando a Demián solo, cada vez más "viajado". Momentos después, Demián encuentra a Priscila; ella pregunta si él tuvo algo qué ver con los que golpearon a Milagros y Conrado; Demián argumenta que únicamente presenció la golpiza. Priscila reclama al junior que no haya intervenido para defenderlos. Le exige que nunca la vuelva a buscar.
"La Iguana" busca a Priscila en casa de los Luna. Priscila ofrece que si no intenta matar a los Montijo, ella a cambio no andará con nadie, más que con él. "La Iguana", enamorado, la besa. Luego la aparta, diciéndole que esta vez no caerá en su juego, pues esos tipos mataron a su madre y ya antes Priscila lo traicionó, rompiéndole el corazón. La joven logra convencer al cholo de que no mate a los Montijo, por lo que le quita la pistola. Están a punto de darse un beso cuando llegan Conrado, Indalesio, León y Milagros, quienes vienen del hospital. Todos miran sorprendidos a "La Iguana" y a Priscila.
En casa de Jovana, Catalina se dedica al quehacer con mucho ánimo, ante la sorpresa de Jovana y Sabrina; las jóvenes no saben que su madre está bajo el efecto del "éxtasis", que probó por equivocación. Al día siguiente, Catalina sigue drogada y continúa, frenética, en sus labores domésticas, ante la extrañeza de sus tres hijas. Horas después, en pleno bajón, Catalina tira en el WC lo que ella cree son aspirinas. Piensa que su estado físico se debe a que las pastillas estaban echadas a perder. Luego rellena el frasco con aspirinas auténticas. Momentos después, afuera de la casa de los Luna, Vinnie y Valente secuestran a Priscila y Jovana.
Marina encara a Imanol, diciéndole que no puede casarse con Bárbara. Admite que lo ama, pero Imanol ahora es quien se comporta con frialdad y aclara que ya la olvidó. Marina se queda trabada. Luego, Imanol acude a casa de León para invitarlo a la boda, informa que se va a Estados Unidos para tratar de ser feliz con Bárbara. Después visita a Jovana en la cafetería. Ella le comunica que León y Marina se besaron. Imanol no puede creer lo que escucha.
Imanol llega al cuarto de Marina, preguntándole a ésta si tiene algo qué ver con León; ella jura que no; Imanol responde que en realidad eso ya no importa, Marina se angustia por lo que oye.
Desde el cuarto de León, "La Iguana" habla con los Montijo, vía teléfono celular. Los mafiosos le pasan a Priscila, quien informa a "La Iguana" que las tienen secuestradas, tanto a ella como a Jovana. "La Iguana" se lo comunica a León, que no da crédito a lo que escucha. Momentos después, desesperados, el dúo se dirige al hotel donde creen se hospedan los Montijo. Descubren que éstos se han mudado. Los Montijo han llevado a Priscila y Jovana a la suite de otro hotel distinto. Les dicen que pronto "tendrán que ver con ellos". Priscila miente a Jovana, diciéndole que no sabe lo que pasa.
Luego de descubrir que Andrea y Antonio ocultan información respecto a su padre, Demián toma las llaves del departamento de Antonio, en venganza. Luego saca un duplicado. Más tarde, Demián entra al departamento y abre la caja de seguridad; el junior encuentra dinero y el papel con el teléfono de Cienfuegos, entonces Demián se percata de que Antonio fue quien robó el dinero de la gabardina. Luego descubre los videos que Antonio esconde y guarda algunos en su mochila. En eso llega Antonio, acompañado de Emilia. Demián se oculta, pero desde su escondite no puede identificar a la chica. Momentos después, Ana descubre en la cama a Emilia y Antonio.
En medio de la formalísima despedida de solteros de Bárbara e Imanol, Marina sube a su recámara, despechada. Imanol la sigue hasta su cuarto, ahí Marina (a causa de tantas presiones y la mala alimentación) súbitamente se desmaya. Imanol se alarma.
Imanol, angustiado, dice a Marina (quien sigue desmayada) que la ama con locura; la joven reacciona débilmente, pero con felicidad. Imanol cree que todo ha sido un truco de Marina para burlarse de él y la deja sola.
Al día siguiente, en el hotel donde la tienen secuestrada, Jovana escucha en el baño unas voces lejanas; entonces se da cuenta de que el desagüe del lavabo da a otra suite, por lo que intenta comunicarse. Una mujer la escucha y promete avisar a seguridad. Minutos más tarde, acuden a la habitación los guardias del hotel... pero los Montijo toman como rehén a Priscila, obligando a Jovana a decir que mintió sobre lo del secuestro, que todo "se trataba de una broma". Molestos, los guardias se retiran; Valente va a lastimar a las muchachas cuando "La Iguana" llama. Valente dice en qué hotel se encuentran; pone como condición veinte minutos para llegar, o si no, matan a las chavas. "La Iguana" llega apenas a tiempo, los Montijo abren y él entra solo, desarmado. Sorpresivamente aparece León, derribando la puerta de una patada. Junto con "La Iguana", León rescata a las chicas en medio de balas, gritos y acrobacias. León y Jovana se esconden en una suite "vacía". Dándose cuenta que están a salvo, la atracción comienza a ganarles, por lo que comienzan a besarse y acariciarse con pasión.
En la iglesia, Imanol y Bárbara están angustiadísimos por la unión que se va a realizar, pero disimulan. El sacerdote pregunta si alguien tiene un impedimento para la boda. Marina está decidida a ponerse de pie para interrumpir la boda.
